Esta edición de Las flores del mal toma el modelo de la publicada el 1861. Sin embargo, anexa los poemas censurados ofrecidos en la versión de 1857, así como aquellos que debían figurar en Las nuevas flores del mal. También presenta un apéndice con los versos que debieron haber formado parte de Los despojos.
Se estructura del siguiente modo: “Las flores del mal” (“Spleen e ideal”,” Cuadros parisinos”,” El vino”,” Flores del mal”,” Rebelión”,” La muerte”), “Los despojos”, “Nuevas flores del mal”, y “Apéndice”.
La mayoría de los poemas fueron escritos en 1844, así que cabe entender la obra dentro de un contexto en el que el movimiento romántico estaba agotado, y en el que se avecinaba un cambio. Asimismo, la revolución de 1848 y la proclamación del segundo imperio, propiciaron un restablecimiento del orden general.
La poesía es el género en el que mejor se aprecia la elección entre lo pasado y lo que se aproximaba.
La época de Baudelaire es una etapa marcada por el ideal del progreso, un progreso arquitectónico, técnico y científico, que llevó consigo el mayor desarrollo de la imprenta, la calidad del papel, y la construcción de prensas modernas. Nació la prensa de gran difusión, de la que el autor se valió para publicar muchos de los poemas que después conformarían Las flores del mal.
A pesar de todas estas mejoras, el avance en el terreno de la moral no tuvo lugar, al menos no con la misma rapidez. Y es por esto por lo que algunos autores comenzaron a rechazar su sociedad.
Baudelaire se autodefinía como “pintor de la vida cotidiana”. También aseguró haber puesto lo mejor de sí mismo en Las flores del mal. Lo cierto es que sus versos están imbuidos de experiencias personales.
El poeta llevó una vida bohemia, extravagante, y de constantes preocupaciones económicas. Encaja con el perfil de poeta atormentado y desamparado que aun encarnaron Balzac o Dostoyevski.
Asimismo, fue condenado a Sade, por Las flores del mal, considerándosele provocador.
En sus rimas se observa la influencia de su padre (antiguo sacerdote), en el campo del conocimiento en el campo religioso (en Gitanos en el camino hace alusión directa a un episodio bíblico). Igualmente vemos ideas compartidas con Balzac (en Castigo de orgullo). Aparece en ellos Jeanne Duval, una actriz mulata ("Perfume exótico", "La cabellera", "Te adoro igual que a la bóveda nocturna", "Meterías al universo entero en tu callejuela", "Sed non satiata") y también una prostituta a la que frecuentó: Louchette ("Una noche que estaba junto a una horrible judía"). La Presidenta, amante de un banquero ("A la que es demasiado alegre", "Reversibilidad", "El alba espiritual" y "Confesión") y Mariette, sirvienta que lo crió ("A la sirvienta de gran corazón que te daba celos") son otras de las personas a las que evoca.
Se dice que la obra de Baudelaire ha dejado un aporte positivo. No sólo Las flores del mal es significativa, sino que con sus "Pequeños poemas en prosa", rompe la diferencia entre la poesía y la prosa. De su estilo puede destacarse el culto por la expresión simbólica. Charles Baudelaire representa, en definitiva, la demanda poética de la palabra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario