Escriu

Mi foto
Alboraya, València, Spain

martes, diciembre 01, 2009

EL RETRATO DE DORIAN GRAY



                               EL RETRATO DE DORIAN GRAY. OSCAR WILDE
                               Alianza Editorial. Madrid, 1999, 2009.
                               Traducción de J. Luís López Muñoz.

Águeda Almudena Llorca Bravo.

JUVENTUD, ¿DIVINO TESORO?
 “¡Qué triste resulta! […]. Me haré viejo, horrible, espantoso. Pero este cuadro siempre será joven […] ¡Si fuese al revés! ¡Si yo me conservase siempre joven y el retrato envejeciera! Daría…, ¡daría cualquier cosa por eso! ¡Daría el alma!”. Estas palabras son las que el protagonista de El retrato de Dorian Gray pronuncia ya en el segundo capítulo de la única novela de Oscar Wilde, palabras que con motivo no hubiese osado decir, de haber sabido aquello que el futuro le iba a deparar.


El extracto de este fragmento pone de manifiesto tanto e tema principal tratado en la obra, como la influencia del Fausto de Goethe en el relato, un Fausto que vende su alma al diablo a cambio de conservar para siempre su juventud.

Al igual que otros autores del XIX, como Dostoievski, Tolstoi o Ibsen, Oscar Wilde se vale de su narración para realizar una crítica a la sociedad en la que vive, una comunidad conservadora, tradicional y rígida. El autor  transgrede, denuncia ese contexto inglés y victoriano en el que él mismo se ubica, despreciando los esnobismos y falsos valores de la burguesía. A esta última por cierto, no le agradó la novela, que cómo no, suscitó polémicas.

La trama, repartida en un total de veinte capítulos (no siguen un orden estrictamente cronológico),  gira (como índica el mismo título), entorno a Dorian Gray y su retrato, que envejece y desmejora a medida que su modelo se corrompe. Dorian sin embargo, permanece inalterable. Narra Wilde: “Todo el mundo se preguntaba cómo alguien tan atractivo y puro había escapado a la corrupción de una época sórdida a la vez que sensual”. La realidad es que no lo hizo.

Asimismo, el argumento puede fragmentarse en tres partes, la primera de las cuales incluiría los diez primeros capítulos, en los que Wilde presenta a sus seductores personajes, sus relaciones, sentimientos, pasiones y ambientes. Por otro lado, es durante estos episodios cuando tiene lugar la muerte de Sibyl.



Del capítulo undécimo al decimoctavo tiene lugar el proceso de decrepitud moral al que el protagonista sucumbe, alcanzando el clímax al asesinar al pintor de su retrato.

A modo de colofón tenemos los dos últimos capítulos que resumen la incapacidad de Dorian para cambiar de nuevo, la moraleja de la obra al fin y al cabo.

Es curioso que el autor emplee diez capítulos completos para contar aquello que sucede en poco tiempo (un mes aproximadamente), y que por el contrario, se valga de tan sólo el siguiente para narrar lo que le acontece  a Dorian en casi veinte años. Esto denota que lo importante para Wilde en esta historia, era su comienzo.

El contraste de ambientes en los que tienen lugar los acontecimientos es representativo, pues encontramos algunos extremadamente distintos. Son opuestos por ejemplo, el de Sibyl y Dorian, o el de los fumaderos de opio y los clubes de la alta sociedad.

Los personajes principales son Dorian Gray (y su retrato), Basil, y Henry, todos ellos imbuidos en algún aspecto, de la personalidad de Oscar Wilde o de aquello que pretende criticar.

Así, el retrato encarna los vicios y amoralidades de la burguesía y tiene personalidad propia, pues en algunos fragmentos se dice que es “el verdadero Gray”. Dorian, por su parte, es aquel ser bueno e inocente que el escritor admira.  Basil representa la homoxexualidad y el artista puro, y Henry es la faceta sarcástica, reprimida y cínicamente humorística, del propio Wilde.

Para contar esta historia, el autor dublinés hace gala de un estilo plagado de excelentes y metafóricas descripciones que caen casi en lo romántico. Emplea por otra parte, algunas elipsis temporales, ironías, e interminables diálogos teñidos de sarcasmo. Su léxico es sencillo, y su sintaxis, clara.

Un dato a resaltar es que la obra estaba formada inicialmente por trece capítulos, episodios que fueron apareciendo en la revista Lippincott’s Monhly Magazine. Fue después del éxito cuando Wilde añadió el resto de capítulos, así como el prefacio que le precede y con el que se previene de las críticas.

En definitiva y como conclusión, en Retrato de Dorian Gray, Oscar Wilde denuncia y evidencia las carencias de su sociedad, pero también se retrata a si mismo y a sus propias carencias.
Y como él dice: “No existen libros morales o inmorales, los libros están bien o mal escritos, eso es todo”. Este, el suyo, a nuestro entender, está más que bien.

7 comentarios:

  1. Eis sabías que este libro em encanta, jaja , no sé cuantas veces me lo habré llegado a leer, casí siempre que voy de viaje lo lelvo en la mochila, por que es fácil y sencillo de leer, además que es cortito... y quieras o no, siempre te muestra un poco de mralidad, y de que a pesar de todo, y los años que han pasado desde que fue escrito, social miente, no hemos cambiado tanto....

    Va, qué me ha gustado el comentario dde texto, jejeje XD

    ResponderEliminar
  2. "cortito", pero si tiene más de 300 páginas con letra de pulga!

    ResponderEliminar
  3. Pues mira los libros qué suelo leer, jajaja... Los del señorito King, o los últimos de Potter, no bajaban de las 600 paginas... Aunque bueno si no recuerdo mal mi versión, de la ed. El Gato negro, ronda las 300... Pero lo que es al caso, a mi se me hace sumamente corto el libro..

    ResponderEliminar
  4. Hurra, viva, y bravo por la subjetividad...

    ResponderEliminar
  5. A qué sí? Hombre, es que ya haías comentado que no se te hacía cortito y tal, así que te dije lo de "mi versión" y lo de que a mi me parecía, jejeje... aunque bueno da igual, también pueden haber comentarios subjetivos,no? Es que eso se pega de ver las noticias, donde la objetividad brilla por su ausencia, enmascarada muy sútilmente...

    ResponderEliminar
  6. Agueda,
    si no t'importa, linko el teu post al meu blog.
    http://lleixes.blogspot.com/2010/03/el-retrato-de-dorian-gray-oscar-wilde.html

    salutacions.
    David.

    ResponderEliminar
  7. Siempre me llamó la atención este clásico, y tras ver la película (que no me gustó mucho), decidí ir a por el libro. Me ha gustado mucho y me ha transmitido un mensaje que la película no consiguió.

    http://sumergidaenlibros.blogspot.com.es/

    Saludos.

    ResponderEliminar